lunes, 18 de enero de 2010

el vampiro me perdono la vida...


En mis mejores años como alumno de una secundaria de Argentina, a principios de los 90, con mi amigo Leonardo fuimos a una sierra en Córdoba. Tal sierra según viejos supersticiosos habitaban los vampiros, por las noches. Había un vampiro al que llamaban Ángelus, que todos temían. Ningún cuello cortado había aparecido, aunque la gente fallecía todo el tiempo y nadie se enteraba.
En una sierra cuyo nombre permanecerá en esta historia secreta, aparecí con mi amigo a eso de las 22 hs. Se escuchaban ruidos extraños. Seguimos caminando por las sierras y nada pasaba, Leonardo dijo:\" Esto es inútil, volvamos que tengo hambre, \". Eso hicimos, al llegar al pueblo note que un hombre de larga melena venia detrás nuestro. Venia con una acompañante. Voltee para verlo mejor pero había desaparecido. Leo, como le decíamos, fue a comprar cerveza a un kiosco. Quedamos en encontrarnos en la puerta de la casa de un amigo. A eso de la 1 de la mañana. Leo nunca llego.
Al otro día fui a su casa pero no había llegado. Pensé en ese que nos seguía. Estuve pensando que habrá pasado. Esa noche la familia hizo la denuncia. A eso de las 23 hs yo estaba en la puerta de una heladería. Vi pasar al hombre de pelo largo. Creí que seria el famoso Ángelus, por el solo hecho de jugar al detective. El hombre se percato! de que yo lo seguía. En un momento pasaron unos camiones, que llamaron mi atención. Cuando mire al hombre no estaba mas. Mire a todos lados y no estaba. Lo perdí de vista por 2 segundos, y este tipo estaba a mitad d cuadra.
Pare y empecé a ver detrás de mi. Mire hacia adelante, al momento apareció detrás de mi: \"Buscas a tu amigo no\" Asentí con la cabeza. Soy al que llaman Ángelus, no es mi nombre pero es lindo. Dijo que me perdonaría por 1a vez en su larga vida. Me dijo que Leo le había servido de cena, porque el era un vampiro. Creí que me verseaba. Se fue y dijo que me dejaría un mensaje especial, que fuera buscar el diario. Se fue y volví a mi casa shokeado.
Al otro día, recibí una carta, que decía que no buscara el diario, pero que viera que en mi jardín estaba el anillo que tenia Leo en su mano. Este anillo tenia sangre. Lo lleve a la policía. Luego me enteraría que la sangre era de mi amigo. Ahora! tengo 30 años. Vivo solo y con temor a los vampiros. No estoy en Córdoba, estoy en Capital Federal. Comprobé que los vampiros existen. Y les tengo mucho miedo.

la luz mala...


La “luz mala” o “farol de mandinga” es una superstición muy conocida en Argentina. Es un mito con trascendencia religiosa que se extiende por casi todo el Noroeste Argentino.
En algunas épocas del año (generalmente las más secas) se suelen ver de entre las pedregosas y áridas quebradas de los cerros del oeste tucumano, cuando los últimos rayos del sol iluminan las cumbres de los cerros y el intenso frío de la noche va instalándose en los lugares sombreados, una luz especial, un fuego fatuo; producto de gases exhalados por cosas que se hallan enterradas conjugados con los factores climáticos; Con terror y morbosidad, los lugareños la denominan “luz mala” o el “farol del diablo”.
En algunas épocas del año, en especial en las más secas, se suele ver a lo lejos; El día más propicio para verla es el día de San Bartolomé, el 24 de agosto, porque es el día en que Lucifer (El Diablo) esta más libre de los poderes celestiales.
La luz mala, es muy temida, porque se la considera maligna, o bien el alma de algún difunto que no ha pagado sus deudas…
Cuando aparece la luz mala se debe hacer lo siguiente:
“si la luz blanca que aparece en la falda del cerro es buena, donde entra hay que clavar un puñal y al otro día ir a cavar… va a encontrar oro y plata. Si la luz es roja huyan o recen el Rosario, se dice que es luz mala, tentación del diablo”.

la llorona...


La llorona era una mujer de 1975, cuando argentina estaba en guerra.
ella cuidaba su hijo como cualquier madre, pero un día le robaron su beba de 18 meses.
ella descontroladamente se ahorco en una cabaña en 1978, su cuerpo fue hallado después de 12 meses, ya que se creía desaparecida está mujer llamada maría del carmen monterriego, o como el mito dice "la llorona".
la muerte de maría causo dolor, mucho dolor, tanto que ya fue olvidada, pero no en los mitos clásicos.
la historia paranormal comienza en 1990, cuando un hombre de villa maría llamado raúl, vio una mujer de unos 33 años que caminaba con un tapado negro por las calles llorando desconsoladamente a las 3:30 de la noche.
el hombre, raúl, fue a hablarle y le dijo que, que hacia caminando con un tapado negro a esas horas de la madrugada, ella no le respondió y siguió caminando... Raúl le volvió a preguntar y ella empezó a gritar estas palabras.
"mi hija!, mi hija!, donde estará mi hija, te quiero, te amo, vuelve, mi hija, mi hija!."
La mujer desapareció y en ese momento Raúl supo que era un fantasma.
se dice que la llorona, va noche tras noches, por los barrios para buscar a su hija, solo se la escucha llorar y en muchas ocasiones roba los bebés y en otras los mata.
Este clásico se lo nombra: la llorona, una madre soltera que sufre por su hija desaparecida.
Este mito fue ignorado hasta 1997, porque en ese año la vieron y la filmaron.
Ahora es clásico y se convierte en un mito que todavía sigue existiendo...

La Historia Del Pomberito.


Duende guaraní que nada tiene que ver con la idea cristiana del demonio. Es un asustador característico del área guaranítica, desde donde se expandió a toda la Argentina, llevado de la mano de la constante migración de correntinos y paraguayos, principalmente. La creencia está fuertemente arraigada en Misiones, Corrientes, Entre Ríos, sur de Brasil y Paraguay.

Se dice que es una enano robusto, velludo, con brazos tan largos que los arrastra, manos desmesuradamente grandes, piernas cortas rematadas con enormes pies mirando hacia atrás (para desorientar a quien lo rastrea), no tiene “coyunturas”, es decir articulaciones del codo y rodilla, lo que hace que sus movimientos sean torpes y grotescos, usa un gran sombrero de paja, y anda sin ropas, aunque su miembro viril enorme es tapado por la profusa barba que le llega hasta el suelo.

ElPomberito gusta muchísimo del tabaco y la miel. Además puede ser amigo o enemigo del hombre, según la conducta de éste. Su función primordial es la de cuidar del monte y los animales salvajes.

Se enoja muchísimo si algún cazador mata más presas de las que consumirá. Si eso ocurre se transforma en cualquier animal o planta y con argucias induce al infractor a internarse a lo profundo de la selva donde se pierde. Lo mismo sucede con el pescador, o aquel que corta árboles que no utilizará. Su presencia no siempre puede ser advertida, porque la capacidad de metamorfosearse, hace que vigile subrepticiamente la conducta de los hombres.

Como es muy lascivo, acecha a las mujeres, especialmente a las que no han sido bautizadas para poseerlas, y viola a aquella esposa que públicamente pone en tela de juicio la virilidad de su marido. Algunos investigadores han recopilado la creencia de que el Pombero puede preñar a las mujeres, solo apoyando el dedo en su vientre. Esto ocurriría si la dama solitaria, sin bautismo, al ser visitada en la noche por él, no le invita tabaco, miel o cigarrillos. Quizá, de esta manera inocente e ingenua, la cultura guaranítica explica los nacimientos extramatrimoniales, hecho muy repudiado en estos núcleos sociales.

Si el Pombero es enemigo, se está expuesto a innumerables peligros dentro del bosque, porque siempre con engaños intentará perderlo en la espesura. Algunas veces provoca extraños accidentes dentro de los ranchos, como por ejemplo que se cierren solas las puertas, o caigan utensilios de la cocina, misteriosamente. Los que están enemistados con el duende, en las noches, suelen escuchar pasos y voces en los alrededores del rancho, como si alguien caminara por el patio en las noches.

En cambio si es amigo, pueden obtenerse grandes ventajas, puesto que él, de manera invisible guiará al cazador hasta el lugar donde se hallan las presas más grandes y gordas, la buena pesca o los mejores frutos silvestres que sirven de alimento. Para ganarse su amistad, es necesario dejarle cada noche, durante treinta días sin interrupción, detrás del rancho, potes de miel, tabaco o cigarrillos, alimentos que le gustan muchísimo. Además, nunca debe pronunciarse su nombre en voz alta dentro de la casa, porque esto lo enoja.

El Pombero nada tiene que ver con el Diablo. Esta es la concepción cristiana del mal, por lo tanto no debe asociarse al duende guaranítico con Satanás. La lujuria, característica común a ambos entes, está presente en todas las civilizaciones. A Lucifer no le preocupa el equilibrio ecológico, porque realiza el mal por el mal mismo. Digo esto, porque cuando el sonado caso de la supuesta aparición de un Pombero en el Barrio Santa Teresita de Presidencia Roque Sáenz Peña, en ocasión de entrevistar a la joven que afirmaba haberlo visto y sido golpeada por él, advertí la presencia de mujeres munidas de Biblias, representantes de un culto evangélico del barrio. Como se negaron a hablar conmigo, no pude intercambiar ideas con ellas. Esta actitud, culturalmente irresponsable, crea mayor confusión en cuanto a la interpretación de la mitología popular. Porque la mujer no estaba poseída, según la concepción del cristianismo, estuvo simplemente bajo los fuertes síntomas de una histeria, provocada por el temor hacia el Pombero, inculcado desde niña en su hogar. Si esas mujeres hubieran conocido nuestra cosmovisión, seguramente no hubieran confundido con tanta liviandad conceptos tan dispares.

Entre los araucanos hay también un “Pombero” llamado Peukén que persigue a las mujeres. Es igualmente un duende bajo y lascivo que pertenece a las regiones boscosas de los hacheros de Chile.

Como San Antonio y el Negrito Pastorero del folklore del Brasil, el Pombero interviene también en la búsqueda de los objetos perdidos, por eso se oye decir: - ¡Pomberito, Pomberito se me haces encontrar, (aquí el nombre del objeto perdido) yo te ofrezco tabaquito!- Esta promesa debe ser cumplida para evitar que el Pomberito se enoje, ya que su disgusto es de cuidado. El nombre guaraní del Pomberito es Cuarahí Yara o Dueño del Sol.

El origen del nombre, quizá lo encontramos en el sur del Brasil, donde se llama “Pombeiro” al que espía. Igualmente nuestros aborígenes pampas llamaban “Bombero” al que marchaba en las líneas de avanzada, reconociendo el terreno, antes y durante los malones.

viernes, 8 de enero de 2010

¿Venden en Mérida tacos de carne de perro?


¿Venden en Mérida tacos de carne de perro?
Con ligeros cambios, hechos sin cuidado alguno, en las últimas semanas comenzó a circular un viejo correo electrónico en esta ciudad, en el que se avisa que en Mérida fue detenida una persona que mataba perros, los beneficiaba y su carne la vendía a taquerías de Residencial Pensiones, Francisco de Montejo y Juan Pablo II. No lo crea.

El correo original es de Guadalajara, en el que hay, incluso, fotografías del supuesto “carnicero”. Al final del pie de foto dice: Fotografía de “El Informador”.

Ciertamente, “El Informador” es un periódico de Guadalajara, por lo que no tendría por qué decir, en la fotografía tomada supuestamente al “carnicero” de Mérida, que la foto era de “El Informador”.

Otra mentira: A la nota original sólo le cambiaron el nombre de la ciudad y de la colonia en la que se suscitó el caso, por lo que en el correo basura que está circulando en esta ciudad se asegura que el “carnicero” fue detenido y la carne, lista para ser distribuida, fue decomisada “por la Policía Municipal en un predio de Residencial Pensiones”.

La Policía Municipal, como se sabe, no tiene jurisdicción en esa zona del poniente meridano.

El origen de esta leyenda urbana, que ya ocasionó malestar entre algunas negociaciones dedicadas a la venta de tacos, posiblemente se debió a una detención realizada en Tijuana, Baja California, en febrero pasado, tras la cual un jefe policíaco se fue de la boca.

Según una nota publicada en el periódico “El Mexicano” el 13 de febrero pasado, la policía de esa urbe fronteriza descubrió un rastro clandestino utilizado para sacrificar perros cuya carne presumiblemente –decía la nota- era vendida para el consumo humano.

“El rastro (decía la nota) fue descubierto en el fraccionamiento El Mirador por la Policía Municipal, en una acción que culminó con tres detenidos.

En ese predio (ubicado en calle Había Vizcaíno número 3084) fueron detenidos Mariana López, Alejandra Loaiza y Edward Evede, de 22, 21 y 25 años de edad.

Ahí –sigue la nota– los municipales encontraron cerca de 200 canes muertos. Los jóvenes dijeron que se trataba de un refugio para perros abandonados, pero hay evidencias de que sacrificaban a unos para alimentar a otros y al parecer una buena cantidad la vendían a expendios de tacos, según la conjetura a la que llegó uno de los jefes de la policía.

Una agrupación de taqueros de Tijuana protestó por esa versión de la policía, que impactó en sus ventas.

A raíz de eso comenzaron a surgir correos (al parecer con fotografías del caso de Tijuana) diciendo que el descubrimiento había sido en Guadalajara, Torreón y ahora en Mérida, sólo que los “chistosos” no hicieron bien la broma, pues dejaron muchos detalles que desbaratan la versión.

11 de septiembre.


Leyendas relacionadas con el 11 de Septiembre.Esta leyenda dice la historia de un matrimonio que acude a Nueva York de viaje de placer, el motivo da igual, y mientras pasean por una de las calles turísticas de la ciudad observan como a una persona desconocida se le cae una cartera al suelo y entonces ellos recogen rápidamente la cartera y se la dan. Tras dársela descubren que es un árabe y este, en agradecimiento, les revela un secreto. Ese secreto es ni más ni menos que no se pasen por Nueva York durante el mes de septiembre por su propia seguridad.


Esta es una leyenda urbana que rápidamente circuló y todo el mundo conoce al árabe que se le cayó la cartera y que dio este consejo a una pareja.


Otra leyenda urbana relacionada es la de que unos 4.000 judíos no acudieron a trabajar el 11 de septiembre.

SÓLO USAMOS EL 10% DEL CEREBRO




Mucho se ha dicho sobre la subutilización de nuestra capacidad al grado de afirmar que sólo usamos el 10% del cerebro. Esta creencia ha sido empujada en gran parte por psíquicos e impulsores de fenómenos paranormales para explicar sus poderes y lo que se puede lograr con entrenamiento. Las técnicas actuales de tomografía PET contradicen esta creencia pues muestran actividad en prácticamente todas las zonas del cerebro. Así como no usamos todos los múculos al mismo tiempo, tampoco se usan todas las áreas cerebrales simultáneamente, pero a lo largo del día se cubren todas las áreas. También es sabido (con algunas excepciones) que una lesión o tumor afectan furtemente las capacidades de la persona.